TITIRIBÍ

Cultura, Patrominio e Historia

Templo Nuestra Señora de los Dolores

Fue construido en el año 1880. Las grandes proporciones y su emplazamiento en la parte alta del parque lo convierten en un volumen destacado, referente urbano. El estilo actual es Republicano y su frontis está custodiado por dos estatuas de San Pedro y San Pablo, además cuenta con una cúpula central y reloj.

En el templo se guardan algunas imágenes de considerable valor artístico, histórico y religioso como el cuadro de la Virgen de los Dolores traído de Sitio viejo (en procesión solemne en abril de 1815), oleo pintado por el maestro español Benicio Muñoz en el año de 1.795. También el sagrario de plata el cual data de 1901, siendo el ganador del segundo premio del concurso de arte religioso en Paris; además la Pila Bautismal elaborada en mármol. Todos ellos son bienes muebles de considerable valor artístico, estético y religioso.

Parque Principal Antonio José Restrepo

Se dice que el diseño fue retomado de Agustín Goovaertz, sin embargo, no existe investigación precisa sobre el diseñador y su construcción, pero se valora como un lugar del cual parte el trazado de todo el poblado. Su estilo es Republicano Moderno. Se localizan en el la edificaciones más representativas, religiosas y administrativas hecho que se plasma en su proceso de amueblamiento simbólico. Varios bustos, fuente, jardineras y el material de construcción, como su forma de herradura, dan cuenta de los diferentes momentos históricos por los que ha atravesado el lugar. Fue diseñado por Pedro Romero en 1939, y lo inauguro el presidente Antonio Santos. El señor Romero tomó como fuente de inspiración la herradura de un caballo, la cual plasmó literalmente sobre el espacio principal del pueblo y la dispuso adecuadamente a la topografía.

Palacio Municipal o Casa Consistorial

Obra que evoca la arquitectura del periodo de la colonización antioqueña, la cual fue construida en el año 1922 por el ingeniero belga Agustín Goovaertz, quien además construyó la antigua gobernación e hizo el diseño en forma de herradura del parque principal y hace parte de las 80 obras listadas y realizadas en su corta estadía en el país (1920-1928), 66 de los cuales se localizan en el departamento de Antioquia.

Casa de Castor Correa Jaramillo

Con dos niveles de altura, este inmueble se adapta a la fuerte pendiente del parque, formando un conjunto armónico con el resto de las edificaciones de este costado. La distribución inferior aunque posee intervenciones, conserva los espacios iniciales de habitaciones y patios que se iluminan y ventilan con varios ornamentados con algunos trabajos de calados en madera.

Capilla Antiguo Colegio de la Presentación

Está conformado por una sola nave con volumen rectangular que hace esquina y se adiciona al volumen del colegio. Este volumen se destaca en el acceso, con un torreón que remata al techo a cuatro aguas, en una cruz y una escultura de bulto de cristo. Su decoración con ventanas ojivales y detalles de molduras y concreto ranurado en la fachada le imprimen elementos de estilo gótico, similar al usado en sus diseños por Agustín Goovaertz.

Vivienda Calle Antonio Jose Cadavid

Con dos niveles de altura, este inmueble de adapta a la fuerte pendiente del parque, formando un conjunto armónico con el resto de edificaciones de este costado. Los pobladores la reconocen como una de las más antiguas casas de habitación que se construyeron en el parque.

Casa de Antonio Jose Correa O.

La construcción de este inmueble corresponde al periodo de auge económico del municipio, correspondiente a la primera mitad del siglo XX. Es una de las edificaciones más antiguas del casco urbano, con estilo propio del periodo Republicano y una obra que demuestra el esfuerzo de los arquitectos en dejar huella especialmente en su fachada.

Templo Sabaletas Virgen del Carmen

Dicha capilla presenta una hermosa arquitectura española. Construida en el año 1882. La construcción de esta capilla corresponde al tiempo en que existiera la fundición en el sitio de Sabaletas. Su construcción fue voluntad de Lorenza Uribe, esposa del rico propietario Carlos Coroliano Amador, cuando fueron poseedores de más de la mitad de la empresa minera.

Se construyó en honor a la Virgen del Carmen. En ella se ubica una caja mortuoria llamada ataúd de las ánimas, en el que velaban a los difuntos del pueblo a los cuales cubrían con una sábana blanca para luego ser sepultados en sus sepulcros definitivos.